La nostalgia es una especie de sentimiento que puede suceder en cualquier momento de la vida pero que está asociada a un recuerdo del pasado. En una época donde este sentimiento se ha hecho patente en todos los sectores como la moda, el cine o los videojuegos, en el automovilismo no podría ser menos, y es que, si bien los coches eléctricos han entrado en nuestras vidas para quedarse, hay un gran catalogo en el que los diseños son de una extravagancia y una modernidad que muchos no se imaginan en sus manos.

Mini, la mítica marca británica, que en 2018 declaró que a partir de 2030 será una firma 100% eléctrica, no ha querido olvidarse de esos nostálgicos aficionados, dueños de uno de sus modelos, y ha comenzado con Mini Recharged, un proyecto oficial de la propia marca, para convertir este clásico en un vehículo completamente eléctrico y darle una segunda vida.

8 febrero, 2022

Para realizar esta transformación hecha en la propia fábrica de Oxford, se retirará el clásico motor de cuatro cilindros por un motor de eléctrico de 90 KW, un equivalente a unos 122 CV, además de una batería con 6,6 KW de potencia que darán una autonomía de 160Km, convirtiendo estos emblemáticos Cooper en unos potentes coches eléctricos con una aceleración de 0 a 100Km/h en unos 9 segundos.

Para quienes duden sobre si esto podría alterar la identidad del característico Cooper, Bernd körber, máximo responsable de Mini ha querido transmitir que “lo que el equipo del proyecto esta desarrollando preserva el carácter del Mini Classic y permitirá a sus fans disfrutar de un rendimiento eléctrico, conectando el pasado con el futuro de la marca”.

Una de las principales ventajas una preparación de este tipo es la facilidad que se le puede dar a los modelos clásicos para la libre circulación por cualquier zona con limitaciones, dada su nueva naturaleza de cero emisiones.